El pasado sábado 28 de septiembre de 2013 en el vertedero de Pinto, este ejemplar de Gaviota sombría de primer año estaba posada en la gran explanada alejada de los vertidos un tanto separada del resto de gaviotas y con claros signos de debilidad.
El ejemplar volaba sin dificultad a pesar de tener una trampa mortal que rodeaba su pico, pues un pez artificial con anzuelos enganchaba ambas mandíbulas e impedían abrirlo para poder alimentarse.
Poco tiempo de vida para este desafortunado individuo, lástima que no se dejara atrapar para ser liberado de ese mortal artefacto.
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